El arte del hummus casero: Guía definitiva para principiantes

El hummus es un puré de garbanzos especiados que se ha popularizado en todo el mundo debido a sus beneficios para la salud y su sabor delicioso. Generalmente se disfruta como bocadillo servido con pan plano o chips, hoy te enseñamos como hacer tu propio hummus casero.

Por extravagante que parezca, esta es una preparación que puedes hacer en tu casa, usando el ingrediente de tu preferencia. Si no sabes como hacer esta preparación hoy te traemos un paso a paso sencillo para preparar tu propio hummus en casa.

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Prepara esta receta en casa para tus invitamos y no falles en el intento.

Beneficios para la salud

El hummus es conocido por ser una buena fuente de proteínas, fibra, vitaminas y minerales esenciales. Además, es un poderoso antioxidante, reduce el colesterol y previene el cáncer de colon.

Una cualidad que no muchos conocen es que el humus es un enorme productor de serotonina, la hormona de la felicidad. Por lo que ayuda a combatir la depresión y síntomas de ansiedad.

Asimismo, ayuda a mantener el azúcar en la sangre constante. Los corredores y personas activas pueden beneficiarse de consumirlo durante el día o inmediatamente después de un entrenamiento para mantener el azúcar en la sangre constante. Además, que es bajo en calorías para incluir en tu dieta.

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Esta es una receta que no puede faltar en tu dieta balanceada.

¿Cómo preparar hummus casero?

Preparar hummus en casa es más fácil de lo que piensas. Para empezar, necesitarás garbanzos cocidos o el vegetal de tu preferencia, tahini, jugo de limón, ajo, comino y aceite de oliva. Simplemente mezcla todos los ingredientes en un procesador de alimentos hasta obtener una textura suave y cremosa. El truco está en añadir poco a poco el aceite de oliva y ajustar el sabor con limón, ajo o comino según tu preferencia.

Para asegurarte de que tu hummus sea un éxito, asegúrate de que el vegetal que elijas esté bien cocido para obtener una consistencia sedosa. Además, no escatimes en el tahini, ya que este ingrediente es clave para lograr un sabor auténtico. Siempre prueba y ajusta los condimentos para encontrar el equilibrio perfecto de sabores.

Ingredientes:

• 400g de garbanzos cocidos (1 lata escurrida y enjuagada, o cocinados desde secos)
• 3 cucharadas de tahini (pasta de sésamo)
• El jugo de 1 limón grande (aproximadamente 3-4 cucharadas)
• 2 dientes de ajo, pelados
• 1 cucharadita de comino molido
• 3-4 cucharadas de aceite de oliva extra virgen
• Sal al gusto
• Agua fría (opcional, para ajustar consistencia)

Paso a paso:

1. Escurre y enjuaga bien los garbanzos si usas los de lata.
2. Coloca los garbanzos en el procesador de alimentos junto con el tahini, el jugo de limón, los dientes de ajo y el comino.
3. Procesa los ingredientes durante 1-2 minutos hasta que estén bien integrados.
4. Con el procesador en marcha, añade lentamente el aceite de oliva en un hilo fino hasta conseguir una textura suave.
5. Si el hummus está demasiado espeso, agrega 1-2 cucharadas de agua fría mientras sigues procesando hasta alcanzar la consistencia deseada.
6. Prueba y ajusta los sabores según tu gusto:
   • Para más acidez: añade más jugo de limón
   • Para más intensidad: agrega más ajo o comino
   • Para más cremosidad: incorpora más tahini o aceite de oliva
7. Sirve en un plato hondo, haz un pequeño hueco en el centro con una cuchara y riega con un poco de aceite de oliva extra.

Consejos para un hummus perfecto:

• El secreto de un hummus sedoso es que los garbanzos estén muy bien cocidos. Si usas garbanzos secos, cocínalos hasta que estén muy tiernos.
• No escatimes en el tahini, es fundamental para conseguir el sabor auténtico.
• Refrigera el hummus al menos 30 minutos antes de servir para que los sabores se integren mejor.
• Conserva en un recipiente hermético en la nevera hasta 5 días.

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